El Palacio Ducal

El Palacio Ducal, centro del poder veneciano, residencia del Dogo y hogar del poder judicial, es aquí donde se llevaba a cabo el gobierno de la ciudad. Desde el punto de vista visual, es el ejemplo perfecto de la arquitectura gótica veneciana, como lo expresó Ruskin: la fusión perfecta entre Oriente y Occidente.

Lo que vemos ahora es la tercera reconstrucción del Palacio, que data del siglo XIV. El núcleo original fue construido en el año 828, justo después de que el cuerpo de San Marcos fuera trasladado a la ciudad desde Alejandría; luego, el edificio fue reconstruido y ampliado a principios del siglo XII.



A diferencia de todos los demás lugares de poder, como fortalezas y castillos, el Palazzo Ducale no está construido con fines defensivos, sino simplemente para lograr una belleza estética, tal era la confianza de Venecia en que nadie se acercaría para atacarla.

El imponente balcón que ven frente al bacino de San Marco fue construido en 1404, en la cima del cual se encuentra la figura de la Justicia, el principal símbolo que gobernaba Venecia.

Los Pilares de Marcos y Teodoro

Este espacio con los dos pilares se llama Piazzetta San Marco, que significa Pequeña Plaza, que representa una especie de entrada a la famosa Piazza San Marco. Sobre los pilares se encuentran los dos patrones de Venecia: el León alado que representa a San Marcos y el poder de la República de Venecia, y San Teodoro matando al dragón, antiguo protector de la ciudad de Venecia.

Llegaron a Venecia en el siglo XI, pero pasaron más de un siglo acostados en el suelo porque nadie sabía realmente cómo erigirlos debido a su peso y tamaño. Fue solo en 1172 que un ingeniero llamado Nicolò Barattieri tuvo la idea de mojar repetidamente las cuerdas de cáñamo atadas a los pilares con agua, que luego se encogerían y apretarían, elevándolos a como los vemos hoy.

Como recompensa personal, la ciudad permitió a Barattieri practicar el juego en el espacio entre los dos pilares, siendo estrictamente ilegal en cualquier otro lugar de la ciudad. Después de su muerte, el espacio entre los pilares se convirtió en el lugar de horribles ejecuciones públicas, como advertencia a la población.

Cuenca de San Marcos

Mirando hacia el agua se encuentra la Cuenca de San Marcos. Desde aquí podrás ver la Isla de San Giorgio Maggiore, con su hermosa iglesia renacentista construida por Palladio en el Renacimiento. La isla era conocida anteriormente como la Isla de los Cipreses antes de convertirse en un importante monasterio benedictino.

En lugar de los numerosos vaporettos y taxis, hasta el siglo XVIII aquí habrías visto miles de barcos de mercancías dirigiéndose al punto de aduana para descargar o abastecerse de mercancías. Desde este punto, miles de pintores de todo el mundo han intentado capturar la panorámica única que ofrece.